A estas alturas debes de estar pensando que ya no hago jabones, en cuanto me descuido un poco los gasto sin hacer antes alguna foto. Como estaba a punto de pasarme otra vez, he cogido la cámara corriendo (ya se nota) y aquí tienes un jabón de miel y propóleo al que he llamado jabón de la colmena, te cuento por qué…
El año pasado compré un propóleo que, aunque estaba bastante limpio, había que repasar. No me voy a poner ahora explicar todo el proceso de limpieza, por cierto bastante laborioso, pero para que no te quedes con las ganas de saberlo, al final de la entrada te dejo un enlace al blog de Patricia de la Vega donde lo explica divinamente. Además descubrirás todas las propiedades de esta joya que nos regalan las abejas.
Siguiendo con lo iba, que ya me empiezo a disipar. Cuando limpias el propóleo, el agua en la que lo has hervido se puede utilizar para hacer jabones, ¡huele de maravilla!, y la cera filtrada también se puede guardar para jabones o ungüentos.
FÓRMULA DEL JABÓN DE MIEL Y PROPÓLEO:
- 57% de aceite de oliva virgen
- 20% de aceite de coco
- 11% de manteca de cacao virgen
- 2% de cera de abeja virgen
Sobreengrasado: 10% Concentración: 28%
TRAZA:
- 10% de manteca de karité
- Miel
Te recuerdo, por si te lías con los porcentajes, que tienes aquí un tutorial sobre cómo utilizar la calculadora de saponificación.
- El aceite de oliva virgen es un oleato de propóleo.
- En sustitución del agua, he utilizado el agua en la que he hervido el propóleo para limpiarlo. Filtrada y congelada.
- Aproximadamente lleva una cucharada sopera de miel por kilo de jabón (el peso total de la fórmula).
- Es MUY IMPORTANTE no abrigar los jabones que llevan miel. Esta vez hasta lo he metido en la nevera unas horas para no llevarme sustos. Si te fijas en la primera foto verás que incluso metiendolo en la nevera, el jabón ha gelificado. Eso te puede dar una idea de la temperatura que coge.
Si no tienes propóleo no pasa nada, este jabón queda también estupendo sólo con la cera virgen y la miel, por lo que te animo a prepararlo. Estoy segura de que te va a gustar.
¡Qué tengas una estupenda semana!
hola!! esta receta me encanta por que amo la miel pero aun soy nobata y no entiendo la formula.
El 10% de sobreengrasado se aplica a la mezcla se aceites y luego añadimos ese 10% de karate para darle un plus.
O saponificamos totalmente la mezcla y añadimos el 10% de karate como sobreengrasado?
No entiendo
Uff, este comentario se me pasó completamente, lo siento.
El sobreengrasado se calcula sobre el total de fórmula pero se reserva para echarlo en la mezcla cuando el jabón ha alcanzado la traza.
Un saludo
Hola amiga! que genial jabón..
Lo que yo tengo es tintura (extracto alcoholico) de propoleo. Crees que me servira para hacer el jabón? en caso de que si, se lo agrego en la traza? a que proporción mas o menos?
Desde ya te agradezco muchisimo..
¡Hola Valeria! Gracias por tu visita 🙂
A mi me da mucha pena utilizar la tintura de propóleo en un jabón, con el calor de la saponificación es muy probable que pierda sus maravillosas propiedades. Te recomiendo que la reserves para otras cosas 🙂
Un besote
Gracias por compartir…!!! muchas gracias 🙂 🙂
Gracias a ti por la visita Elizabeth. Me alegro de que te guste 🙂
Hola Ada! Si que es un jabón estupendo, deja la piel genial.
Un besote
Que buen jabon Lurdes, me encanta !!!! gracias por tu dedicacion
Hola Virginia! Lo de las fotos es cuestión de práctica y de fijarse en unos cuantos detalles. Dentro de poco haré una entrada para saber esos detalles en los que hay que fijarse 🙂
Un besote
Hola Carmen! Oler no te creas que huele mucho, pero deja la piel genial. Un besote.
Las fotos te quedan tan bonitas como los jabones. Es mi asignatura pendiente
Lourdes, ese jabón tiene que oler, como para darle un bocado. Estupendo.
Un jabón estupendo, me encanta la miel y los otros productos de la colmena.Vivan las abejitas.
Si María José, las abejitas nos dan un montón de cosas buenas 🙂